Publicado: 17.DIC.2024
La eficiencia energética es una práctica que tiene como objetivo hacer un uso eficiente de la energía, optimizando los procesos productivos y haciendo un uso racional de los recursos disponibles, de manera que empleando lo mismo, o incluso menos, se logre producir más bienes y servicios.
Para conseguir este fin, las empresas deberán implantar un sistema de gestión de energía que busque el cumplimiento de los objetivos de eficiencia energética, y que las mejoras que se lleven a cabo sean monitorizadas en cada etapa con mediciones y toma de datos, para comprobar que se alcanzan los resultados esperados.
En Endress and Hauser España, empresa líder en instrumentación de medida y soluciones de automatización, llevan años de experiencia ayudando a la industria de proceso a descubrir formas de ahorrar energía y costes, pero manteniendo siempre la calidad, seguridad y fiabilidad en el proceso productivo.
Ahorrar energía va a aportar mejoras tanto económicas como ambientales, además de otros beneficios para la empresa, como son:
• Ahorro de costes: El coste de la energía representa un porcentaje importante en cualquier proceso productivo.
• Mejorar la competitividad: La reducción de la cantidad de energía consumida durante el proceso productivo favorece la competitividad de la empresa, además de mejorar su cuenta de resultados.
• Mejora el rendimiento del proceso: El aumento en el control y seguimiento de los equipos, además del incremento en el mantenimiento, favorece la mejora del rendimiento del proceso productivo, lo que favorecerá la reducción de consumo de energía.
• Mayor innovación tecnológica: La búsqueda de la eficiencia energética va ligada casi siempre a la innovación.
• Disminución de emisiones de CO2: El dióxido de carbono resultante de la combustión de combustibles fósiles es la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) generadas por la actividad humana, por lo que una disminución en el consumo de energía y el cambio de combustibles fósiles por energías renovables favorecerá la disminución de emisiones de GEI, contribuyendo así a la lucha contra el cambio climático.
Un modelo productivo basado en la eficiencia energética resulta clave en sectores industriales que son de gran valor estratégico para la sociedad, como son la industria química, farmacéutica, energética o en procesos industria alimentaria.
La mayoría de estos sectores comparten equipos y procesos, a los que se les puede aplicar medidas de ahorro energético. Veamos algunos ejemplos:
1. Hornos y calderas: En la mayoría de compañías de los sectores químico, farmacéutico y alimentaria, se hace uso de un gran consumo energético para alimentar a estos equipos. Su uso eficiente depende de un buen control y mantenimiento regular. En algunos casos, el rendimiento de hornos y calderas se puede mejorar aún más mediante el uso de equipos 'complementarios'.
2. Recuperadores de calor: El uso de recuperadores de calor permite aprovechar mejor la energía, por ejemplo, para el precalentamiento del agua de aporte a la caldera. Al introducir el agua en la caldera a una temperatura superior a la del agua de red se obtiene un incremento del rendimiento de la caldera, o lo que es lo mismo, un descenso del consumo del combustible.
3. Aislamiento: Desde el punto de vista energético, el aislamiento permite reducir las pérdidas de calor que se producen a través de las paredes de las tuberías, calderas, etc. El calorifugado de tuberías y accesorios reduce enormemente las pérdidas de calor, lo que supone un ahorro importante de energía.
4. Pérdidas en la distribución: Las pérdidas de fluidos se localizan fundamentalmente en las tuberías y en los purgadores. Un programa de mantenimiento de las instalaciones que tenga por objetivo la búsqueda y reparación de las fugas, es esencial para una operación eficiente de los sistemas.
5. Motores eléctricos: En cualquier industria la energía dedicada al accionamiento de motores eléctricos supone un gran porcentaje de la energía total consumida. En general, la mayoría de motores en una planta industrial están muy sobredimensionados, funcionando una gran parte del tiempo en condiciones muy por debajo de las nominales de diseño. El uso de variadores de frecuencia que ajuste la velocidad de giro del motor a los requerimientos de cada momento, supondrá un ahorro importante de energía.
6. Calefacción y aire acondicionado: Mantener un lugar de trabajo a una temperatura confortable es esencial para el personal y puede ser importante para algunos procesos industriales. Para ahorrar dinero, se recomienda el uso de controles del sistema de calefacción y A/A que se ajuste en respuesta a un cambio en las condiciones climáticas o un cambio en el turno de trabajo.
7. Iluminación: La iluminación puede ser un buen punto de partida para reducir los costos de energía debido a su simpleza y su asequibilidad. Reemplazar las lámparas por otras más eficientes, o hacer un estudio comparativo de tarifas disponibles en el mercado, puede suponer también un importante ahorro energético.
En definitiva, fomentar una nueva cultura del ahorro que suponga la implicación de todo el personal en el uso eficiente de la energía, favorecerá la sostenibilidad económica, empresarial y ambiental, además de fomentar una imagen corporativa que responda a criterios de una mayor responsabilidad social empresarial.
Archivado en: / Eficiencia Energética / Industria
Publicidad