Fachadas ventiladas vs. SATE: Cuál es el mejor sistema para tu proyecto

 

Publicado: 31.MAY.2023

 

Cuando se trata de la rehabilitación de fachadas, es común encontrarse con dos sistemas ampliamente utilizados: las fachadas ventiladas y el sistema de aislamiento térmico por el exterior (SATE).

Ambos sistemas ofrecen beneficios significativos en términos de eficiencia energética y mejora estética, pero es importante conocer las características y consideraciones de cada uno antes de tomar una decisión.

En este artículo, analizaremos en profundidad los sistemas de fachadas ventiladas y SATE para ayudarte a elegir el más adecuado para tu proyecto de rehabilitación.

 

Fachadas ventiladas: el equilibrio entre eficiencia y estética

Las fachadas ventiladas son un sistema constructivo que consiste en la creación de una cámara de aire entre el revestimiento exterior y la estructura del edificio. Esta cámara de aire permite la circulación del aire, lo que contribuye a mejorar el aislamiento térmico y acústico del edificio. Además, el revestimiento exterior puede ser de diferentes materiales, como cerámica, piedra, vidrio, entre otros, lo que brinda una amplia gama de opciones estéticas para personalizar la fachada.

Una de las principales ventajas de las fachadas ventiladas es su capacidad para reducir la transferencia de calor y humedad hacia el interior del edificio. Esto se traduce en un mejor confort térmico, menor consumo energético y, en última instancia, en ahorros en las facturas de calefacción y refrigeración. Además, el espacio de la cámara de aire actúa como una barrera adicional contra la entrada de ruido exterior, mejorando así el aislamiento acústico del edificio.

 

Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE): la eficiencia en aislamiento térmico

El sistema de aislamiento térmico por el exterior, conocido como SATE, es una opción popular en la rehabilitación de fachadas. Consiste en la aplicación de un aislamiento térmico en el exterior de la fachada, cubierto con un revestimiento protector. Este sistema proporciona un excelente aislamiento térmico, minimizando las pérdidas de calor en invierno y la entrada de calor en verano.

Una de las ventajas del SATE es su fácil instalación, ya que no requiere grandes modificaciones en la estructura del edificio. Además, al colocar el aislamiento en el exterior, se evitan los puentes térmicos y se mantiene la inercia térmica de los muros interiores. Esto contribuye a un mejor control de la temperatura interior, reduciendo la necesidad de utilizar sistemas de calefacción o refrigeración.

El SATE también ofrece beneficios en términos de protección del edificio. Al aplicar un revestimiento protector, se crea una barrera adicional contra la humedad y los agentes atmosféricos, prolongando la vida útil de la fachada y evitando posibles daños estructurales.

 

Conclusiones para la elección

A la hora de elegir entre fachadas ventiladas y SATE, es importante tener en cuenta varios aspectos:

•  Objetivos de la rehabilitación: Determina los objetivos específicos de tu proyecto de rehabilitación. ¿Buscas mejorar el aislamiento térmico, la eficiencia energética o la estética de la fachada? Identificar tus prioridades te ayudará a tomar una decisión informada.

•  Características del edificio: Evalúa las características de tu edificio, como su antigüedad, tipo de construcción y estado de la fachada. Algunos sistemas pueden adaptarse mejor a ciertos tipos de estructuras, por lo que es importante considerar la viabilidad técnica de cada opción.

•  Normativas y regulaciones: Investiga las normativas locales y regulaciones de construcción relacionadas con la rehabilitación de fachadas. Algunas áreas pueden tener restricciones o requisitos específicos para la elección del sistema.

•  Presupuesto: Analiza el presupuesto disponible para el proyecto de rehabilitación. Los costos pueden variar entre las dos opciones, por lo que es fundamental considerar el costo del material, la mano de obra y los posibles ahorros energéticos a largo plazo.

•  Asesoramiento profesional: Consulta a profesionales especializados en la rehabilitación de fachadas para obtener recomendaciones y asesoramiento personalizado. Ellos podrán evaluar tu situación específica y brindarte información más precisa sobre cuál de los dos sistemas se adapta mejor a tus necesidades.

Tanto las fachadas ventiladas como el sistema SATE son opciones efectivas para la rehabilitación de fachadas en términos de eficiencia energética y mejora estética. La elección del sistema dependerá de tus objetivos, las características del edificio, las normativas locales, el presupuesto y el asesoramiento profesional.

Ambas opciones ofrecen beneficios significativos en términos de aislamiento térmico y protección del edificio. Al tomar una decisión informada, podrás transformar la fachada de tu edificio, mejorando su rendimiento energético y su apariencia estética. Recuerda que contar con profesionales especializados te brindará el conocimiento y la experiencia necesarios para lograr los mejores resultados en tu proyecto de rehabilitación de fachadas.

 

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