Publicado: 27.ABR.2025
Las normas y estándares en la industria permiten garantizar la calidad, la seguridad y la libre circulación de productos en un mercado único, como es el europeo. También contribuyen a proteger el medio ambiente y la salud de los consumidores que hacen uso de aquellos productos que hayan sido fabricados siguiendo directrices que marca la normativa europea.
En concreto, en la industria mecánica, gracias a la aplicación de los mismos estándares y reglamentos en todos los países, permite la fabricación de productos que son compatibles y comparables independientemente del país de la Unión Europea donde hayan sido fabricados. De esta manera, terceros países que quieran comercializar sus productos dentro del territorio de la Unión, deberán cumplir también con los mismos estándares.
La serie normativa que rige la industria mecánica europea es muy amplia y abarca todo el ciclo de producción del producto, incluyendo no sólo la fase de fabricación, sino también requisitos de seguridad aplicables al transporte y manipulación de materiales en el interior de la planta como, por ejemplo, en lo que se refiere a los tipos de carretillas elevadoras que deben usarse dependiendo del tipo de proceso que se trate.
La existencia de un marco normativo armonizado, aplicable de igual forma a todos los países de la Unión, aporta un beneficio económico esencial para el sector europeo de la industria mecánica.
Al mismo tiempo, los requisitos que imponen los estándares y reglamentos europeos en el diseño y fabricación de máquinas, permiten disponer de máquinas más seguras que contribuye de manera significativa a reducir el coste social de los accidentes y los daños a la salud de las personas, tanto en el lugar de trabajo como en el entorno doméstico.
El coste social debido al número de accidentes provocados directamente por la utilización de máquinas, se ha ido reduciendo en los últimos años gracias a la aplicación de directivas europeas que permiten la integración de requisitos de seguridad más estrictos en las fases de diseño y fabricación de las máquinas.
A continuación, se indican las principales normas y directivas europeas que se aplican a la industria mecánica en general:
• Seguridad en máquinas: La Directiva de Máquinas 2006/42/CE es la directiva europea fundamental que sirve para establecer los requisitos esenciales de seguridad y salud para todas las máquinas que se comercialicen en la Unión Europea. Todos los fabricantes deben asegurarse que sus productos cumplen con los requisitos que marca esta directiva a fin de obtener el marcado CE, obligatorio para poder vender en Europa. Próximamente esta directiva será reemplazada por el Reglamento (UE) 2023/1230, de aplicación a partir del 20 de enero de 2027. Este nuevo reglamento, que derogará a la Directiva 2006/42/CE, va a reforzar los requisitos de seguridad para las máquinas y productos relacionados, modernizando y reforzando los estándares de seguridad en línea con los últimos avances tecnológicos.
• Seguridad eléctrica: Otra importante norma europea es la Directiva de Baja Tensión 2014/35/UE que establece las condiciones para la comercialización en toda la UE de material eléctrico destinado a utilizarse con tensiones nominales entre 50-1000 V en corriente alterna, y entre 75-1500 V en corriente continua. Su objetivo es garantizar que el material eléctrico se utilice de forma segura y no ponga en peligro la salud y la seguridad de las personas, los animales domésticos o los bienes, exigiendo el marcado CE de todos los productos para su comercialización.
• Compatibilidad electromagnética: Otra importante norma es la Directiva 2014/30/UE que regula la compatibilidad electromagnética de los equipos eléctricos y electrónicos. Busca asegurar que los equipos no generen interferencias electromagnéticas que puedan afectar a otros aparatos y que sean inmunes a las perturbaciones electromagnéticas previsibles en su entorno de funcionamiento. También requiere el marcado CE en todos los productos que cumplan con esta directiva.
• Estándares de fabricación y calidad: Las Normas ISO (Organización Internacional de Normalización) desarrolla una amplia gama de estándares de calidad que son relevantes para la industria mecánica europea. Entre las más relevantes están la ISO 9001, que es la norma más reconocida a nivel mundial para sistemas de gestión de calidad; la ISO 14001 que se enfoca en los sistemas de gestión ambiental, ayudando a las empresas a minimizar su impacto ambiental; la ISO 45001, norma que especifica los requisitos para un sistema de gestión de seguridad y salud en el trabajo, o la ISO/TS 16949 (ahora IATF 16949) que define los requisitos particulares para la aplicación de la norma ISO 9001 en la producción en serie y de piezas de recambio en la industria del automóvil. Existen otras muchas normas ISO específicas para diferentes sectores de la industria mecánica, como la ISO 2768 e ISO 286 que especifican las tolerancias generales para dimensiones lineales y angulares, y para ajustes entre piezas, o la ISO 8062 que establece las tolerancias para piezas de fundición.
Evidentemente las normativas y estándares que se apliquen a un producto fabricado de la industria mecánica dependerá del tipo de producto, su uso previsto y de las directivas que le sean aplicables.
Existen otras importantes directivas europeas que deben ser tenidas en cuenta dependiendo del contexto de producción, como son las siguientes:
• Directiva de emisiones sonoras en el entorno (2000/14/CE): Esta directiva tiene como objetivo principal regular las emisiones sonoras en el entorno debidas a las máquinas cuando se usan al aire libre y en exteriores.
• Directiva de equipos a presión (2014/68/UE): Esta directiva europea de equipos a presión proporciona una guía obligatoria para el diseño, la fabricación y la evaluación de la conformidad para su uso de los equipos a presión que trabajen con una presión máxima permitida superior a 0.5 bar, obligatorio para todos los equipos a presión para poder ser comercializados en cualquier país de la UE.
Además de las anteriores, están las Normas DIN dictadas por el organismo de normalización alemán Deutsches Institut für Normung, y cuyos estándares son ampliamente utilizados en la industria europea, especialmente en la industria metal-mecánica. De hecho, muchas de las normas europeas (EN) se basan en estándares DIN.
En definitiva, las normas, reglamentos y directivas europeas sirven para asegurar un estándar de calidad y seguridad en los productos comercializados en los países de la Unión. Protegen la salud de las personas, los bienes y el medio ambiente del uso de equipos y máquinas. Y están aportando un beneficio económico, a la vez que mejoran la competitividad de las empresas en el sector industrial europeo.
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